domingo, 16 de diciembre de 2012

Feliz Navidad y Próspero 2013

Hacía un par de años que tenía en mente este post. Aprovecho hoy y que la palabras han invadido mi mente, formando más o menos las frases que he puesto abajo. No significa que sea la última entrada del año. Significa que sentía que quería hacerlo, y lo he hecho.

Poco me gustaba a mí la Navidad. Siempre pensé que consistía en asistir a comidas copiosas con aquellos familiares que no habías visto durante el año, en una explosión de consumismo desmesurado (tanto en comida como en regalos) y en enviar al garete todos los esfuerzos de un año en perder esos kilos que te pusiste en la última Navidad. Y si lo mirabas desde el punto de vista de objetivos conseguidos y de nuevos que te pondrías, hasta te podrías estresar. Tenía miedo de poder transmitir sólo eso a mis hijos.
Ahora es diferente. Consiste en recordarte a ti mismo y a los demás que eres un elemento importante en todos los círculos: el familiar, el de la amistad, el profesional, el ciudadano, …
En cuanto a objetivos, es un error marcárselos por años naturales. Enfrentémonos a los retos tal y como se presentan, buscando el apoyo en aquellos que más cerca están y más fuerte te hacen sentir. Y si caes exhausto en el reto, siéntete afortunado por tenerlos cerca para  ayudarte a levantarte y renacer como Ave Fénix.  Y ¿cómo no?, tomar nota de las lecciones aprendidas.
No lo programemos todo, dejemos que vengan las cosas solas, traspasando si viene sola la oportunidad, esa fina línea que hay entre el compañerismo y la amistad.
Lo dicho: ¡Feliz Navidad y Próspero 2013!

1 comentario:

  1. No podía estar mas de acuerdo. Leyendo tu blog me encontrado este post que en su día se me paso. Excelente reflexión :)

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