Ayer viernes se lanzaron los dos primeros satélites del sistema de navegación global europeo denominado Galileo. El proyecto lleva cierto retraso, el presupuesto inicial se ha casi doblado respecto al inicial y la inversión privada se ha retirado. La decisión de impulsar Galileo se tomó después de que EE.UU. desactivara la señal de GPS durante la guerra de Kosovo para proteger sus operaciones militares.
El nuevo sistema presenta dos beneficios principales: mayor precisión (de hasta centímetros) y un sistema de búsqueda y rescate en caso de emergencia que no disponen ni el GPS ni el Glonass (el sistema de navegación ruso).
El futuro nos deparará más lanzamientos para completar la red Galileo y estar atentos a China con su sistema Beidou.